Estimulación magnética transcraneal para tratamiento de la depresión resistente al tratamiento farmacológico.

Resumen

La estimulación magnética transcraneal repetitiva ha demostrado ser eficaz para el tratamiento de la depresión resistente, pero su duración estándar es prolongada. Este estudio evaluó la seguridad y eficacia del protocolo acelerado Lyford-Pike, que aplica 12.000 impulsos diarios (divididos en dos sesiones de 6000) durante 5 a 15 días, con una frecuencia de 10 Hz y al 120 % del umbral motor. Se incluyeron 39 pacientes con depresión resistente que continuaban en tratamiento con antidepresivos y psicoterapia. Las puntuaciones en el Inventario de Depresión de Beck (BDI-I) fueron medidas al inicio y a los días 5, 10 y 15. Los resultados mostraron que el 53,85 % de los pacientes remitieron al final del tratamiento, y el 61,54 % experimentaron una mejoría significativa. El protocolo fue bien tolerado, con un solo caso de cefalea transitoria como efecto adverso. Estos resultados sugieren que el protocolo Lyford-Pike es una opción eficaz y segura para la depresión resistente, aunque se necesitan estudios adicionales para evaluar su durabilidad a largo plazo.

Introducción

La depresión es una de las enfermedades psiquiátricas que más afecta y prevalece en la población general, y desafortunadamente un tercio de los pacientes con depresión severa no responde a los tratamientos convencionales, como la terapia y la medicación psiquiátrica.1 En el intento de dar respuesta a las personas con depresión resistente al tratamiento psiquiátrico es que surge la alternativa de la estimulación magnética transcraneal (EMT). La EMT es una forma de neuromodulación, una técnica no invasiva y no convulsiva en la que una bobina electromagnética especialmente diseñada se coloca contra el cuero cabelludo del paciente para entregar un pulso magnético corto y potente que induce corrientes eléctricas en la corteza cerebral, para así modular la actividad neuronal.2 La estimulación magnética transcraneal repetitiva (EMTr) ha demostrado seguridad y eficacia para la depresión resistente al tratamiento (DRT), pero requiere un tratamiento diario durante 4-6 semanas.3 Con el objetivo de mejorar la calidad del tratamiento de los pacientes con DRT, se comienzan a utilizar protocolos diferentes y más amenos para los pacientes. Estos reciben la denominación de estimulación magnética transcraneal acelerada (EMTa), la cual consiste en aplicar el mismo número de pulsos de la EMTr pero en períodos de tiempo más cortos, siendo estos de unos pocos días. Esto conlleva ventajas para el paciente en términos de acceso y aceptación del tratamiento.4 Cabe destacar que existe más de un tipo de protocolo acelerado, entre los cuales se destacan el theta burst y el SAINT. Una gran ventaja de los protocolos acelerados es que el efecto antidepresivo puede observarse en pocos días en lugar de las varias semanas que suelen ser necesarias para una plena eficacia de la medicación y/o la psicoterapia. En estudios anteriores realizados con esta modalidad, se observó que tras el tratamiento con EMTa la depresión y la ansiedad disminuían significativamente y las mejoras persistían entre 3 y 6 semanas después.5 En nuestro afán de continuar buscando mejores resultados, e inspirados en algunos protocolos EMTa, en el Instituto de Psiquiatría y Psicología de Montevideo (IPM) creamos nuestro propio protocolo acelerado, al cual llamamos protocolo Lyford-Pike, que consiste en proporcionar al paciente 12.000 impulsos cada día, divididos en 2 sesiones de 6000 cada una, con una pausa de 5 minutos entre sesiones. Se utilizó una frecuencia de 10 Hz y una intensidad equivalente al 120% del umbral motor del paciente. La duración de cada tren fue de 4 segundos y el intervalo entre ellos de 8 segundos, siendo la duración de cada sesión de 25 minutos. El número de días propuesto al inicio del tratamiento oscila entre 5 y 15 en función de la evolución clínica. El protocolo de Lyford-Pike se asemeja al protocolo acelerado en la cantidad total de horas previstas (15). En lo que difiere es en el sistema de refrigeración de nuestro aparato, que consiste en enviar aire frío a 17 grados Celsius a la bobina, a través de una bomba de vacío industrial que permite dosificar la máquina a 12.000 pulsaciones al día/hora. Gracias a esto podemos distribuir y gestionar las sesiones de forma más parecida al protocolo estándar, generando entonces que el proceso sea menos costoso e invasivo en tiempo para los pacientes, ya que no consume muchas horas al día, y se estima conseguir resultados entre 1 y 3 semanas

Alexander George Lyford-Pike Peirano

Médico psiquiatra. Ex asistente interino de la Cátedra de Psiquiatría de la Universidad de la República (Udelar). Director del Instituto de Psiquiatría y Psicología de Montevideo (IPM). Expresidente de la Sociedad de Psiquiatría Biológica del Uruguay. Socio emérito de la Sociedad de Psiquiatría Biológica del Uruguay. Miembro de la Sociedad de Psiquiatría del Hospital McLean de Harvard, filial de la Facultad de Medicina de Harvard.

Gonzalo Erlatz Medina

Licenciado en Psicología. Magíster en Psicoterapia Cognitivo Conductual y Sistémica. Instituto de Psiquiatría y Psicología de Montevideo (IPM)

Martín Carlos Schweizer Arigón

Licenciado en Psicología. Instituto de Psiquiatría y Psicología de Montevideo (IPM).

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