Un estudio aleatorizado a largo plazo y gran escala ha demostrado que el tratamiento de la infección por Helicobacter pylori (H. pylori) en pacientes con antecedentes familiares de cáncer gástrico reduce más de la mitad el riesgo de desarrollar la enfermedad. La erradicación efectiva de la infección también mostró una reducción significativa del 73% en el riesgo de cáncer gástrico en comparación con aquellos en quienes la infección persistió.
El riesgo de cáncer gástrico se incrementa entre dos y tres veces para las personas con antecedentes familiares, especialmente si se trata de un pariente en primer grado. Los investigadores, liderados por el Dr. Il Ju Choi del National Cancer Center en Corea del Sur, destacan que erradicar H. pylori puede disminuir este riesgo sustancialmente.
No obstante, el Dr. Alexander C. Ford, profesor de gastroenterología en la Universidad de Leeds, advirtió que estos resultados podrían no ser aplicables a poblaciones occidentales, ya que el cáncer gástrico es más prevalente en países asiáticos como Corea, China y Japón, y este contexto geográfico debe tenerse en cuenta al aplicar estos datos.
El estudio incluyó a 1.676 participantes con edades entre 40 y 65 años, todos con infección confirmada por H. pylori y un familiar de primer grado con antecedentes de cáncer gástrico. Los pacientes fueron asignados aleatoriamente a dos grupos: uno con tratamiento y otro con placebo. Los participantes del grupo de tratamiento recibieron una combinación de amoxicilina (1.000 mg), claritromicina (500 mg) y lansoprazol (30 mg) durante siete días.
Se realizaron endoscopias de vigilancia cada dos años, y al final del estudio, los resultados mostraron que solo el 1,2% de los pacientes del grupo tratado desarrollaron cáncer gástrico, en comparación con el 2,7% en el grupo placebo (p = 0,03).
Durante el seguimiento, se evaluó el estado de erradicación de H. pylori en 1.587 pacientes, y se confirmó en el 70,1% de los pacientes tratados, frente al 7,1% en el grupo placebo. Aquellos en quienes la infección fue erradicada mostraron un riesgo significativamente menor de desarrollar cáncer gástrico (0,8%), en comparación con aquellos en quienes la infección persistió (2,9%).
Los efectos adversos del tratamiento fueron más comunes en el grupo con tratamiento, pero la mayoría fueron leves. Además, aunque el tratamiento de H. pylori redujo el riesgo de cáncer gástrico, no tuvo un impacto significativo sobre la frecuencia de adenomas gástricos, lo que sugiere que la infección por H. pylori no activa la secuencia adenoma-carcinoma en la patogenia del cáncer gástrico.
El tratamiento para erradicar H. pylori en pacientes con antecedentes familiares de cáncer gástrico demuestra ser una estrategia efectiva para reducir el riesgo de desarrollar esta enfermedad. Sin embargo, los resultados del estudio deben interpretarse con cautela en poblaciones fuera de los países con alta incidencia de cáncer gástrico, como Corea del Sur, China y Japón.
Este estudio fue financiado por el National Cancer Center de Corea del Sur, y los autores no han declarado conflictos de interés económicos.
Este contenido fue publicado originalmente en The New England Journal of Medicine.